viernes, 24 de junio de 2011

Meditación y sanación con Reiki

Además de sus fines terapéuticos, Reiki tiene una gran utilidad como método para conseguir la paz y tranquilidad interna. En mi opinión, el gran secreto de Reiki es que nos ayuda a "fluir" o a estar en armonía con nuestro entorno y gracias a esta equilibrio con el entorno, logramos encontrarnos más relajados, tranquilos y más en paz con nosotros mismos.
MÁS INFORMACIÓN Y EJEMPLOS PRÁCTICOS:
Auto Relajación
Todos los que habéis realizado un curso de Reiki sabéis que lo más bonito de Reiki es que es un método auto-aplicable. De ese modo, no necesitamos a nadie "que nos haga" como es el caso de masajes, acupuntura, shiatsu etc., con Reiki encontramos o aumentamos nuestro bienestar nosotros mismos.

Relajación en cualquier sítio o momento
Otra ventaja de Reiki es que no necesita un ambiente especial para practicarlo, ni adoptar posturas a lo mejor inapropiadas para nuestro entorno (yoga en la cola del banco, tai Chi en el autobús etc.). Se puede practicar en cualquier momento de una forma bastante discreta, ¡sin que nadie se de cuenta!.
Reiki consiste en "llamar" a una energía muy pura y canalizarla hacia nosotros, normalmente a través de las manos. Esta energía nos ayuda a alcanzar la armonía y la paz interna a medida que fluye a través nuestro. Lo más interesante es que podemos hacer esa "llamada" a la energía en cualquier momento, sin entrar en un estado de conciencia alterada, meditar durante un largo periodo de tiempo etc.
Una de las cosas que sorprende más a los alumnos de los cursos durante sus primeras prácticas es el hecho de que Reiki actúa de forma independiente de tu estado, es decir, que puedes estar viendo la TV y dándote Reiki al mismo tiempo, sin prestar atención a lo que estás haciendo y funciona igual, o puedes estar en una reunión con gente, participar en la conversación, pero al mismo tiempo sentir cómo la energía fluye por tu cuerpo.
Un técnica de relajación muy versátil
Obviamente, esta "peculiaridad" de Reiki lo hace muy efectivo para conseguir relajarse en situaciones "hostiles" o situaciones que requieren que estés relajado pero no te permiten llevar a cabo ejercicios específicos para hacerlo. Conozco un abogado alumno mío ¡que abre una sesión de Reiki al empezar un juicio! De esta forma, él está relajado y tranquilo durante el proceso y le ayuda tremendamente.
Ejemplos prácticos de cómo darse Reiki en situaciones cotidianas:
En la cola del banco, supermercado, etc
Abres la sesión de Reiki, y basta con tener las manos en los bolsillos para aplicar Reiki al chakra base mientras esperas tu turno.
Transporte público
En el metro, autobús, taxi etc.
Abres una sesión de Reiki y posas la mano de una forma natural en el plexo solar. Muy útil si te agobian las aglomeraciones de gente o sufres de claustrofobia.
En reuniones de trabajo
Abres una sesión de Reiki, bien posas las manos en las piernas o bien las colocas sobre el plexo solar en la postura denominada "de escucha". Muy útil para protegerte si hay elementos conflictivos en la reunión o que te son hostiles.
Mirando la televisión
¿Qué mejor manera de conseguir una relajación total? Ante actividades de ocio pasivas como puede ser ver la TV, Reiki es una forma ideal de aumentar ese grado de relajación. Simplemente abres una sesión, pones las manos donde más consideras que necesitas Reiki (detrás de la cabeza es ideal) y ¡adelante! Reiki hace el resto.
Meditación y Reiki
La mayor parte de personas que meditan buscan lograr una paz interna y una profunda relajación. Da la casualidad que es justamente lo que hace Reiki - armonizar nuestro cuerpo y espíritu -.
Por ello, hacer una meditación "abriendo" una sesión de Reiki acentúa nuestra capacidad de "desconectar" y profundiza en ese estado de relajación que buscamos. Muchas personas se quejan de lo difícil que es "apagar la mente". Un comentario muy típico es "No consigo meditar porque mi cabeza no para de dar vueltas". Bien, pues aquí es donde Reiki actúa, aumentando tu grado de separación con tu mente, permitiéndote entrar en lo más profundo de tu ser.
Para meditar con Reiki, abre una sesión, posa tus manos cómodamente sobre las piernas para aplicarte Reiki, y lleva a cabo cualquier tipo de meditación, por ejemplo Yoga. Notarás cómo tu grado de relajación es más profundo y más intenso a medida que la energía fluye a través de ti, aumenta tu armonía y grado de relajación.
A continuación tienes un ejemplo de una meditación de Reiki. Puedes bajártela en un fichero MP3. Si haces Reiki y eres nivel I, abre una sesión antes de empezar y coloca tus manos cómodamente sobre las piernas. Si eres nivel II (o superior) de Reiki, ahueca tus manos, visualízate a ti mismo dentro del hueco y usando el símbolo de distancia, abre una sesión con la petición: "para mi meditación".
Si nunca has hecho Reiki, te invito a probarlo de todos modos, muchos logran visualizar y sentir esa energía puesto que Reiki no tiene la patente sobre "llamar" a una energía superior, ¡simplemente nos facilita mucho el proceso!
¡Disfruta del momento!





Además de sus fines terapéuticos, Reiki tiene una gran utilidad como método para conseguir la paz y tranquilidad interna. En mi opinión, el gran secreto de Reiki es que nos ayuda a "fluir" o a estar en armonía con nuestro entorno y gracias a esta equilibrio con el entorno, logramos encontrarnos más relajados, tranquilos y más en paz con nosotros mismos.
MÁS INFORMACIÓN Y EJEMPLOS PRÁCTICOS:
Auto Relajación
Todos los que habéis realizado un curso de Reiki sabéis que lo más bonito de Reiki es que es un método auto-aplicable. De ese modo, no necesitamos a nadie "que nos haga" como es el caso de masajes, acupuntura, shiatsu etc., con Reiki encontramos o aumentamos nuestro bienestar nosotros mismos.

Relajación en cualquier sítio o momento
Otra ventaja de Reiki es que no necesita un ambiente especial para practicarlo, ni adoptar posturas a lo mejor inapropiadas para nuestro entorno (yoga en la cola del banco, tai Chi en el autobús etc.). Se puede practicar en cualquier momento de una forma bastante discreta, ¡sin que nadie se de cuenta!.
Reiki consiste en "llamar" a una energía muy pura y canalizarla hacia nosotros, normalmente a través de las manos. Esta energía nos ayuda a alcanzar la armonía y la paz interna a medida que fluye a través nuestro. Lo más interesante es que podemos hacer esa "llamada" a la energía en cualquier momento, sin entrar en un estado de conciencia alterada, meditar durante un largo periodo de tiempo etc.
Una de las cosas que sorprende más a los alumnos de los cursos durante sus primeras prácticas es el hecho de que Reiki actúa de forma independiente de tu estado, es decir, que puedes estar viendo la TV y dándote Reiki al mismo tiempo, sin prestar atención a lo que estás haciendo y funciona igual, o puedes estar en una reunión con gente, participar en la conversación, pero al mismo tiempo sentir cómo la energía fluye por tu cuerpo.
Un técnica de relajación muy versátil
Obviamente, esta "peculiaridad" de Reiki lo hace muy efectivo para conseguir relajarse en situaciones "hostiles" o situaciones que requieren que estés relajado pero no te permiten llevar a cabo ejercicios específicos para hacerlo. Conozco un abogado alumno mío ¡que abre una sesión de Reiki al empezar un juicio! De esta forma, él está relajado y tranquilo durante el proceso y le ayuda tremendamente.
Ejemplos prácticos de cómo darse Reiki en situaciones cotidianas:
En la cola del banco, supermercado, etc
Abres la sesión de Reiki, y basta con tener las manos en los bolsillos para aplicar Reiki al chakra base mientras esperas tu turno.
Transporte público
En el metro, autobús, taxi etc.
Abres una sesión de Reiki y posas la mano de una forma natural en el plexo solar. Muy útil si te agobian las aglomeraciones de gente o sufres de claustrofobia.
En reuniones de trabajo
Abres una sesión de Reiki, bien posas las manos en las piernas o bien las colocas sobre el plexo solar en la postura denominada "de escucha". Muy útil para protegerte si hay elementos conflictivos en la reunión o que te son hostiles.
Mirando la televisión
¿Qué mejor manera de conseguir una relajación total? Ante actividades de ocio pasivas como puede ser ver la TV, Reiki es una forma ideal de aumentar ese grado de relajación. Simplemente abres una sesión, pones las manos donde más consideras que necesitas Reiki (detrás de la cabeza es ideal) y ¡adelante! Reiki hace el resto.
Meditación y Reiki
La mayor parte de personas que meditan buscan lograr una paz interna y una profunda relajación. Da la casualidad que es justamente lo que hace Reiki - armonizar nuestro cuerpo y espíritu -.
Por ello, hacer una meditación "abriendo" una sesión de Reiki acentúa nuestra capacidad de "desconectar" y profundiza en ese estado de relajación que buscamos. Muchas personas se quejan de lo difícil que es "apagar la mente". Un comentario muy típico es "No consigo meditar porque mi cabeza no para de dar vueltas". Bien, pues aquí es donde Reiki actúa, aumentando tu grado de separación con tu mente, permitiéndote entrar en lo más profundo de tu ser.
Para meditar con Reiki, abre una sesión, posa tus manos cómodamente sobre las piernas para aplicarte Reiki, y lleva a cabo cualquier tipo de meditación, por ejemplo Yoga. Notarás cómo tu grado de relajación es más profundo y más intenso a medida que la energía fluye a través de ti, aumenta tu armonía y grado de relajación.
A continuación tienes un ejemplo de una meditación de Reiki. Puedes bajártela en un fichero MP3. Si haces Reiki y eres nivel I, abre una sesión antes de empezar y coloca tus manos cómodamente sobre las piernas. Si eres nivel II (o superior) de Reiki, ahueca tus manos, visualízate a ti mismo dentro del hueco y usando el símbolo de distancia, abre una sesión con la petición: "para mi meditación".
Si nunca has hecho Reiki, te invito a probarlo de todos modos, muchos logran visualizar y sentir esa energía puesto que Reiki no tiene la patente sobre "llamar" a una energía superior, ¡simplemente nos facilita mucho el proceso!
¡Disfruta del momento!





TORTAS FRITAS


INGREDIENTES
• 1 taza mediana de harina leudante
• 1/2 kilo de harina común
• 1/4 taza mediana de aceite
• 1 Huevo
• Agua tibia para mezclar
• 1 cucharadita de sal
• 1 cucharada de azúcar
• Grasa vacuna para freír

PREPARACIÓN PASO A PASO
  1. Amasá en un bol la harina leudante, la harina común, la sal, el azúcar, el huevo, el aceite y el agua tibia.
  2. Dejá reposar hasta que la masa aumente su volumen.
  3. Estirala y cortá círculos del tamaño que quieras tus tortas fritas.
  4. Freí los discos de masa en la grasa vacuna que debe estar derretida (si usás aceite asegurate que esté bien caliente).
  5. Cuando las sacás de la sartén escurrilas y pasalas por azúcar.
  6. Servilas calentitas, vas a ver que son un manjar